Esenciales: 500.000 firmas para 500.000 personas esenciales

La campaña Esenciales es una oportunidad para que España se reconozca como país diverso, que mire a las personas migrantes como parte de su sociedad y sujetos plenos de derecho.

Desde acciónenred Andalucía nos hemos sumado activamente a la recogida de firmas para conseguir las 500.000 firmas necesarias para poder presentar en el Congreso de los Diputados la Iniciativa Legislativa Popular que propone la regularización de las personas que se encuentran en situación administrativa irregular en nuestro país. Personas que ya forman parte de nuestra sociedad pero carecen de los derechos más básicos.

Si tienes DNI y eres mayor de edad, no lo dejes más y apoya con tu firma. Puedes hacerlo en nuestros locales y, además, ahora puedes firmar con certificado digital.

Seguimos avanzando en el RETO pero necesitamos llegar a más gente. Son nuestros vecinos y vecinas, convivimos en nuestros pueblos y ciudades, pero no tenemos los mismos derechos. Alquilar un piso o firmar un contrato de trabajo no está a su alcance hasta que no se regularice su situación.
En los momentos más duros de la pandemia se puso en evidencia lo esenciales que estas personas son para toda la sociedad, no olvidemos que lo siguen siendo en la actualidad y que es de justicia reconocerlo a través de este mecanismo legal.


Derecho a ser menor, una oportunidad de futuro

10-diciembre-2021

Este año queremos dedicar el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, a reflexionar sobre la situación que sufren muchos menores migrantes y, de manera especial, aquellos y aquellas que viajan solos. Además, analizamos el nivel de incumplimiento de la Convención de los Derechos de los Niños (CDN), que son los derechos humanos de los menores, por parte de los diferentes países y de la Unión Europea.

Como dice UNICEF, “no hay causa que merezca más alta prioridad que la protección y el desarrollo del niño, de quien depende la estabilidad y el progreso de todas las naciones y, de hecho, de la civilización humana”. La protección y la resolución óptima de aquellos conflictos en los que la infancia se ve vulnerada y maltratada supone, no solo mejorar las vidas de los niños y niñas hoy, sino también la del mundo adulto futuro.

Sin embargo, es fácil constatar que en el trato que reciben estos menores no prevalece, como debería de ser, “el interés superior del menor” como garantía del respeto a los derechos recogidos en la CDN. Más bien, al contrario, se prioriza su condición de extranjero y la consecuente vulneración de su derecho a una infancia segura.

Así, vemos con preocupación cómo el trato que reciben estos menores en las fronteras, ya viajen con sus familias o lo hagan solos, no se guía por “el interés superior del menor.” No se respeta el primer artículo de la CDN que establece la minoría de edad hasta los 18 años, y no a los 12, como edad para garantizar la protección especial que merecen por ser niños y niñas.

Por otra parte, cuando los menores llegan a territorio español sin el acompañamiento de una persona adulta, el sistema de acogida deja mucho que desear: malas práctica y normas que pueden violar el respeto de los derechos humanos de estos niños. Aunque también hay algunos avances como el paso dado por el Gobierno para poner fin a la discriminación de estos menores cuando pasan a ser mayores de edad y así facilitar el paso a la vida adulta.

Nuestra campaña "Derecho a ser menor, una oportunidad de futuro. ¿Jugamos?" consta de diferentes materiales, como un folleto, una imagen, un Kahoot, un dosier con materiales de apoyo y acciones para escenificar los derechos de estos niños y niñas, y que ponemos a disposición de otras entidades que trabajen con jóvenes y que deseen colaborar ya sea solas o con nosotros en esta iniciativa.

- Kahoot:

VÍDEO RESUMEN DE ACTIVIDADES


Con los derechos no se juega

10D "Con los derechos no se juega"

Hoy, 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, desde acciónenred Andalucía queremos expresar
nuestra preocupación por el retroceso que se está produciendo en Europa en el
respeto a la Declaración Universal de los Derechos Humanos y, de manera
particular, en materia de migración y asilo.

En estas últimas semanas, hemos asistido a una serie de acontecimientos,
tanto a nivel europeo como español, que evidencian una intolerable falta de
respeto con los derechos de las personas migrantes y refugiadas. El nuevo Pacto
sobre Migración y Asilo de la Comisión Europea, las devoluciones en caliente, que siguen siendo ilegales pues no se están llevando a
cabo con las debidas garantías procedimentales que exige el Tribunal
Constitucional, así como la lamentable acogida que se ha ofrecido a
miles de personas migrantes en Canarias, son hechos que suponen un grave
atropello a las garantías que deben proteger a estas personas.

Este año, la ONU vincula el aniversario a los efectos de la
pandemia y especialmente a las consecuencias que tiene sobre los países más
pobres, que va a suponer un salto atrás en los avances que se estaban
produciendo para combatir la pobreza a nivel mundial. En nuestro país los
sectores que se van a empobrecer como efecto de la pandemia son muchos pero,
sin duda, uno de los colectivos más afectados será la población inmigrante por
su situación especialmente precaria en el mercado de trabajo y, en
general, por su vulnerabilidad social, así como las personas refugiadas. Otro
de los efectos del aumento de la pobreza provocado por la COVID -19, es el
incremento de los flujos migratorios. La llegada de migrantes a Canarias en
estos meses es un ejemplo de ello, aunque no sea el único factor
explicativo. 

A nadie se le escapa que la actuación de los gobiernos europeos
en materia migratoria está demasiadas veces orientada por criterios que
responden a un juego político, de equilibrio y de equilibristas, para
satisfacer los deseos de los países más contrarios a acoger a personas
migrantes y refugiadas y que ya tiene un largo recorrido en el seno de la UE,
condicionando las políticas migratorias y usando los  derechos humanos como moneda de cambio. Una
situación que está imposibilitando una política común e integral en materia de
migraciones y asilo basada en el cumplimiento de los derechos humanos y que
garantice la responsabilidad compartida y la solidaridad entre los países de la
Unión Europea en la gestión de los flujos migratorios.

Las políticas europeas para gestionar estos flujos no pueden
estar condicionadas, de manera casi exclusiva, por el fortalecimiento de las
fronteras exteriores que tienen como objetivo evitar que lleguen a Europa
inmigrantes y refugiados, aunque ello suponga acostumbrarnos a ver como mueren
cada día cientos de personas en el Mediterráneo y, en los casos en los que
estas personas consiguen llegar a nuestras costas, poner en marcha una serie de
mecanismos para expulsarlos. La externalización de las fronteras, las políticas
de devolución y retorno y los mecanismos de control en fronteras, están guiadas
con demasiada frecuencia por criterios que no respetan los Derechos Humanos.

Asimismo, los países del Sur tampoco podemos convertirnos en
los guardianes de las fronteras europeas. La política seguida por el Gobierno
de España en Canarias, bloqueando el traslado a la península de los
inmigrantes, se explica por las presiones europeas que quieren evitar que estas
personas puedan llegar a sus territorios, aunque ello suponga un  trato denigrante y contrario a los valores
europeos y españoles, convirtiendo a Canarias en una nueva “Moria”. 

Por todo ello, exigimos el blindaje de los derechos humanos en el seno de la Unión Europea y su obligado cumplimiento por parte de todos los Estados miembros. Con los derechos humanos no se juega, no se negocia, son un imperativo legal y moral de nuestras sociedades.

VÍDEO: https://youtu.be/tihhrGVhfIY

DOSSIER: http://www.accionenred-andalucia.org/dosier-derechos-humanos-y-migraciones/

https://youtu.be/tihhrGVhfIY