Ampliamos nuestras clases de español a nuevo alumnado

A lo largo del último año hemos puesto en marcha un proyecto de clases de español para personas extranjeras en colaboración con la ONG No Borders en nuestro local de Sevilla. Inicialmente nuestro alumnado era un grupo de personas ucranianas que había expresado la necesidad de reforzar el idioma a raíz de su llegada a España tras el estallido de la guerra en Ucrania.

Sin embargo, a lo largo de este último mes el grupo se ha ido diversificando y se ha abierto también a alumnado procedente de diferentes países subsaharianos que ha sido derivado por CEPAIM. Se trata de personas que llevan poco tiempo en Andalucía, con un nivel de español muy bajo, y proceden de Senegal, Gambia, Congo, Burkina Faso, Mali, Ghana, Nigeria…

Las clases son muy participativas y pretenden responder a situaciones en las que se puedan encontrar en su vida cotidiana, en la compra, en el alquiler de una vivienda, ante la parada del transporte público, en las relaciones entre amigos y conocidos, etc.

Un espacio de aprendizaje e intercambio intercultural en el que disfrutamos de muy buen ambiente y se generan lazos de apoyo y convivencia.


Alumnado ucraniano participa en las clases de español

A lo largo de este trimestre hemos consolidado el proyecto de clases de español para personas ucranianas en Sevilla en colaboración con la ONG No Borders.

Durante los últimos meses han participado 14 alumnos de entre 7 y 17 años y 5 personas adultas que asisten todos los miércoles por la tarde. El profesorado lo conforman personas voluntarias de ambas entidades.

Las clases son muy participativas tratando de que sean útiles en las necesidades más inmediatas del alumnado. Se genera muy buen ambiente y es un espacio muy agradable y de convivencia entre todas las personas que asisten.

El proyecto responde a las necesidades expresadas por los centros educativos de la zona que cuentan con escasos recursos para facilitar la inmersión lingüística de este alumnado ucraniano que llega sin conocimientos algunos del idioma y tiene que hacer frente a todas las asignaturas propias de la educación secundaria. Además, se han ido sumando al grupo menores que cursan primaria y algunos familiares que también necesitan apoyo.

Una iniciativa necesaria y motivadora que ofrece recursos de aprendizaje a la vez que fomenta la integración de las personas que han tenido que huir de sus hogares a causa de la guerra.